El Taekwon-Do es el Arte Marcial coreano, creado por el General Choi Hong Hi en el año 1955. Es considerado uno de los sistemas de combate y defensa personal más poderoso y completo. Demanda por lo tanto un intenso entrenamiento a nivel físico como mental. De hecho, tiene también un aspecto deportivo y competitivo, que permite a quien lo practica desarrollar las cualidades propias de un deporte, con el agregado de contar con una fuerte disciplina filosófica y psicológica, que ayudan al practicante en su desarrollo personal de manera integral, proporcionándole a su vez un sistema de defensa personal tan necesario en nuestros días, para grandes y chicos, mujeres y hombres.
En el caso de los niños, los conduce a que ellos no desarrollen conductas violentas sino todo lo contrario, les enseña la disciplina, les fomenta el autocontrol y los ayuda a valorar la importancia de la inofensividad y el respeto mutuo.
Aquí dejo el Taekwon-Do para la humanidad, como una huella del hombre del siglo XX.
– Gral. Choi Hong Hi
En este sentido, se hace notorio que los niños con tendencia a la agresividad comienzan a comportarse de forma más reflexiva, mientras que los pequeños más tímidos ganan mucho en la auto-confianza. Esto se debe a que la práctica del Taekwon-Do moldea positivamente el carácter de los pequeños.
Sin embargo, esa no es la única ventaja que proporciona este Arte Marcial:
Fomenta los Valores y la Disciplina.
El Taekwon-Do se rige por una serie de principios y reglas que contribuyen a crear hábitos de conducta y pensamiento que no solo ayudan al niño a mejorar en el Arte mismo, sino que también se extrapolan dichas cualidades y habilidades a su proceso educativo y su conducta escolar, logrando que el pequeño sea disciplinado y responsable y desarrolle buenos hábitos de estudio, al lograr una mayor capacidad de concentración mental y firmeza de voluntad. A lo largo de los años, somos testigos de que la práctica del Taekwon-Do se traduce en un mejor rendimiento escolar y muchos de los niños que se matriculan en nuestras escuelas vienen incluso con recomendación de sus tutores o sicólogos pedagógicos.
Estimula y Desarrolla la Concentración Mental
El Taekwon-Do, como Arte Marcial y Deporte, implica el desarrollo de grandes habilidades motoras finas y gruesas y exige un alto grado de concentración. Mente y cuerpo deben lograr un alto nivel de coordinación y destreza para lograr alcanzar sus altos objetivos. La actitud mental consecuente, es una de alta capacidad de concentración, sensibilidad intuitiva y una fortaleza de carácter que lo invitan a vencer y no retroceder frente a los objetivos trazados y las dificultades en el camino. Esto se traduce en la formación del niño, en un carácter firme, con valores y capacidad de enfrentar los retos que presupone la vida, con una firme moralidad que lo aleja de los peligros que abundan en el mundo fuera de casa. Es incluso muy recomendado por los profesionales en psicología para los niños con TDAH, sobre todo para aliviar síntomas conductuales como la impulsividad y la hiperactividad. De hecho, la práctica del Taekwon-Do produce un aumento de la dopamina, la serotonina y la norepinefrina a nivel cerebral, provocando cambios positivos en la capacidad de atención de los niños.
Mejora su Desarrollo Físico y Crecimiento
La práctica de este Arte Marcial, estimula y desarrolla la elasticidad, la fuerza, la coordinación y la resistencia. También mejora sus reflejos, aumenta la capacidad pulmonar, la resistencia cardiovascular y potencia el conocimiento de su cuerpo. Además, es ideal para evitar la obesidad infantil y el sedentarismo, ya que estimula la actividad y la buena alimentación, con todos los beneficios que ello presupone.
Desarrolla el Autocontrol
El Auto-Control es uno de los 5 Principios básicos del Taekwon-Do. A pesar de que los niños aprenden técnicas de ataque y defensa personal, y aprenden a combatir en competencia, siempre se les enseña hacer uso de ellas solo si es imprescindible y a desarrollar un firme autocontrol. Por eso, éste es uno de los principios básicos en este Arte Marcial. Nuestras competencias exigen un estricto autocontrol y una precisión técnica admirable, para poder salir victorioso, pues el caso contrario llevaría a la derrota o a la descalificación, logrando que el niño incorpore y fije esa cualidad en su carácter. La competencia también les enseña a administrar la victoria con humildad y hacer frente el fracaso como parte del aprendizaje, alejándolos de la depresión o de una actitud derrotista.
Estimula la Autoconfianza
El Taekwon-Do es un arte y deporte excelente para estimular la confianza y la seguridad en sí mismo, por eso se recomienda su práctica a los pequeños extremadamente tímidos o con problemas de autoestima. Enseña y facilita la sociabilidad y la interacción sin temores, complejos o arrogancias, que generan discriminación y aislamiento.
Fomenta el Respeto Mutuo
Uno de los Principios básicos del Taekwon-Do es la Cortesía y el respeto mutuo, tanto a los Instructores como a los padres y los compañeros. Por lo tanto, el niño aprende a respetar los puntos de vista y decisiones de los demás, aunque no siempre los comparta, y a ser cortés y amable en todo momento.
Aumenta la Sensibilidad y Capacidad de Análisis
Con el paso del tiempo, los niños aprenden a adelantarse a los movimientos de su adversario. Aprenden a intuirlos y anticiparse a cualquier peligro. También comprenden cuándo un movimiento está mal ejecutado y son capaces de determinar por qué, puesto que van entendiendo las reglas de la física y el comportamiento corporal, muscular y articular. Esa capacidad intuitiva y de análisis es una cualidad y operación de la mente y del pensamiento que podrán aplicar a otros aspectos de su vida cotidiana. En el Taekwon-Do, el estudiante aprende no solo movimientos y técnicas, sino estudia los principios físico/dinámicos tras su mecánica de movimiento y el propósito tras cada uno de ellos.
Fomenta las Relaciones Sociales y la Actuación en Grupo
Tanto en las prácticas del Taekwon-Do como en la Competencia por Equipos, se trabajan las diferentes técnicas de manera grupal, demandando la coordinación y la interacción dirigida con otros practicantes. Esto ayuda inmensamente a los niños a socializar y a coordinar sus movimientos con otros dentro de una metodología de entrenamiento que fomenta el compañerismo, la solidaridad y la importancia que cada niño tiene dentro del grupo. Por eso, el Taekwon-Do contribuye a que los pequeños desarrollen sus habilidades sociales.
Para que los niños aprovechen todos los beneficios que implica la práctica del Taekwon-Do, lo ideal es que empiecen a entrenar desde una edad temprana. Por lo general, están preparados entre los 3 y 5 años, una etapa en la que ya han comenzado a desarrollar muchas de las habilidades físicas que necesitan para su práctica. En cualquier caso, serán los Instructores calificados quienes tengan la última palabra sobre la edad adecuada en un caso particular, ya que en ocasiones es mejor esperar un poco más, antes de someter a los pequeños a un estrés físico o mental innecesario.
Es importante tener en cuenta que el Taekwon-Do es un Arte Marcial muy técnico que demanda muchas horas de entrenamiento y cuyas habilidades se van logrando conforme a la edad y a los niveles y grados que se van alcanzando en toda una vida de estudio y perfeccionamiento. Por tanto, el rol de los padres debería ser el de apoyar y animar a sus hijos con mucha paciencia, sin exigirles demasiado ni hacer comparaciones que puedan desalentarles. Todos parten de diferentes cualidades potenciales, tanto en lo físico como en lo sicológico. El Taekwon-Do y su Instructores calificados, están preparados para desarrollar y empoderar en el niño y en todo practicante, todas aquellas características necesarias para el logro de la maestría en el Arte. Su metodología no discrimina entre sexo, edad, o características distintas en lo físico o en lo mental y psicológico. Parte del probado convencimiento que todos están preparados para alcanzar un alto nivel sin importar su punto de partida. Esas diferencias sólo son tomadas en cuenta para ajustar la metodología a las necesidades de cada quien de manera personalizada.
Por todo ello, es difícil encontrar comparativamente hablando, una disciplina tan completa como el Taekwon-Do, que empodere a niños y grandes en absolutamente todas sus potencialidades humanas. Solo basta tratar y apostar a su entrenamiento, y los resultados saltarán en muy poco tiempo a la vista.
Autor: Maestro Enrique Deacon – VIII Dan ITF
Que beneficioso es el Taekwon-Do para los niños, lo recomiendo para todos.